03 julio 2013

...

Hoy retomo el tiempo de hace ya 3 años...

Tiempo en el que te escribí 25 cartas. Ni una más ni una menos. 
Comenzando desde el 3 de Noviembre, cuando decidí darle un punto final a nuestra historia, historia que hasta la fecha sigue estando presente. Y cada una de esas cartas eran la sombra de lo que fue la curva de tu sonrisa cuando me sonreías, cuando creía que todo estaba bien y en realidad todo estaba podrido. Casi puedo revivir nuestro último encuentro en cada punto suspensivo que te dedicaba. Las escribía con tanta desesperación que mis palabras parecían gritarle a tu ausencia que volvieras, como si por el hecho de meterlas en un sobre hicieran que tuviera más valor que cuando están desnudas en una simple hoja. Las guardé con una marca de beso al final, ese que siempre te daba y las acuno con esa canción que era tan nuestra cuando las peleas se solucionaban a carcajadas, o entre las sábanas. Aún recuerdo que las releí tantas veces antes de poder mandártelas, algunas parecen arrugarse como lo hace tu frente cuando te enfadas. Pareciera que mis manos sólo eran capaces de escribirte lo mucho que te odiaba y que no quería volver a verte nunca más. Yo se que en el fondo, una parte de ti odiará leer las tantas mentiras que me decías y que siguen matándome cada vez que reabro el pasado. Sin embargo, nunca fui capaz de poner tu dirección en el sobre. Siempre que lo intentaba me temblaban tanto las manos que al final solo quedaba un feo borrón, así como acabó nuestra historia en ese entonces. Y pareciera que el buzón me gritaba que las enviará de una vez y así poder tragarse todas las ganas que te tenía, cada vez que deslizaba una carta por su rejilla. 


Llámalo miedo, llámalo vanidad. Pero nunca te las mandé, todas y cada una de ellas fueron metidas en una caja y aún siguen guardadas en mi último cajón, olvidadas, como están ahora las promesas que nos hicimos en ese tiempo. Ahora la cuestión es esta, no se si sea conveniente mandártelas. Puedo reabrir el pasado y tener sentimientos encontrados, tanto tú, como yo. Podemos sonreír porque pudimos pasar una etapa de inmadurez juntos. O mejor quemarlas, y así nunca sabrás lo que pasaba por mi mente cuando decidí olvidarte y que a pesar de todo, nunca lo conseguí...

2 comentarios:

  1. Holi.....!!! fíjɑte que pɑsɑbɑ mirɑndo blogs y encontré el tuyo y lɑ verdɑd me pareció super originɑl!! *-* es muy bonito y te felicito ♥, me he leído unɑ que otrɑ publicɑción y lɑ verdɑd tienes mucho don pɑrɑ escribir tɑn sincero e inspirador ijijiji ♥... sigue ɑsí ●ω●


    ✿ http://lifeiskestin.blogspot.com.es/ ✿

    ResponderEliminar
  2. I was looking through some of your content on this internet site and I believe this site is really instructive! Keep putting up.
    online for kids games

    ResponderEliminar