Recυerdos Radioactivos.

23 de Diciembre.

¿Recuerdas ese día?

Fue un viernes por la madrugada. Eran las 12 de la noche y yo ya estaba en la cama. Recuerdo que el día anterior estaba con ese con el que salía. Ese que te cae tan mal, esa persona por la cual un día terminé contigo por estar con él. Le dejé de hablar por ti y después de todo el daño que me hiciste, nos volvimos a buscar. Eran las 3am y tú no dejabas de llamarme, pero no te contesté. Simplemente no quería hablar contigo. Sabía lo que me ibas a decir, lo sabía mucho mejor que tú. El móvil sonaba y sonaba; hasta que decidí contestarte. Me empezaste a reclamar, "¡Ya andas con él verdad! ¿Tan fácil fue olvidarme?" Recuerdo que no parabas de hacerme preguntas sobre él, él y él. Y fue ahí donde cometí la estúpida idea de decirte que solo era mi "amigo". Que entre él y yo no existía absolutamente nada que no fuera amistad. Tan equivocada estaba al mentirte y tan equivocado estabas al creerme. No quería perderte, no quería que pensaras que ya te había olvidado, o alomejor si, pero no de esa manera. 

Nos dieron las 5am.. y no parábamos de hablar, no queríamos colgar. Me dijiste cuanto me amabas y me hablaste de ese miedo que tenías de perderme, te calaba que saliera con alguien más, lo sabías. Pero cariño, tú tuviste la culpa de todo lo que ha pasado entre nosotros dos. Así que no me vengas hablando de sinceridad cuando tú no lo hiciste en su momento. Media hora después; te cansaste de escucharme, me cansé de tus reclamos y fue ahí que colgamos y cada quien por su lado. A las 7am estabas afuera de mi casa tocando el timbre. Llamaste y me dijiste que saliera. Te pase a la sala. Me abrazaste como si nunca lo hubieses echo, te abrace hasta el punto en que fuiste mi mejor momento. Llegaste drogado, tomado y no se que tanto más traías, ¡Estabas helado! Y sin decirnos más nos empezamos a besar. Besos que nos llevaron a más. No podía evitarlo, no quería pararlo. Me cargaste y me aferre a tu cuello, solo sé que al final terminamos bajo las sábanas. Esas sábanas que te gustan tanto. Tú y yo, yo y tú, sin nadie a nuestro alrededor. Te amo, me decías una y otra y otra vez. No parabas de pedirme perdón. Lloraste, enserio te vi tan mal, nunca te había visto así. Te besé, me abrazaste. Fue un momento que no quería que terminara nunca, por el simple echo de que tú estabas ahí. Conmigo, a mi lado. Queriéndome, amándonos.  

No se lo que pasó ese día entre nosotros. 

Pero, volví a sentirte cerca de mi.